Pure Pool

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Cuando el realismo no lo es todo


Creado por los mismos autores que Hustle Kings, este nuevo simulador de billar da un extraño retroceso respecto al anterior juego, considerado uno de los mejores hasta la fecha. Pure Pool es muy inferior a Hustle Kings en todos los aspectos, y parece haber salido al mercado o bien antes de tiempo, o bien recortado adrede con ánimo de vender contenido adicional después.


Billar escaso

Pure Pool te permite jugar principalmente a dos modalidades de billar: Bola 8 y Bola 9. También hay un par de modos más, que son ligeras variantes de los principales. Posteriormente tienes unos Desafíos para un jugador cuya motivación principal es subir posiciones en un ránking online.


El juego está constantemente en línea y puedes retar a cualquier jugador que esté conectado en ese momento. Si acepta el reto entonces jugáis los dos y el perdedor puede intentar hacer una partida de revancha. Si no consigues jugar simultáneamente (que es lo que me ha pasado a mí a pesar de haberlo intentado innumerables veces) entonces puedes descargar su “ADN” de jugador: unas estadísticas que crean una Inteligencia Artificial con la que puedes competir localmente.

Sea como sea, bien jugando contra los jugadores predeterminados o contra los jugadores ADN, vencer en Pure Pool es bastante difícil. Incluso en el nivel más fácil los jugadores controlados por la máquina son excepcionalmente buenos. En el nivel Novato pueden llegar a cometer uno o dos fallos por partida como mucho, lo que hace muy complicado vencerles.

Los Torneos intentan, sin éxito, darle algo más de variedad a un juego de billar que tiene una gran carencia de escenarios, mesas, skins de bolas o modos de juego. Hay un nivel de experiencia asociado a tu manera de jugar, va subiendo según perfeccionas tu técnica, pero sólo sirve para adquirir nuevos tacos. De hecho en Pure Pool no hay motivación por mejorar tu nivel porque sencillamente no hay nada más después de la primera partida.

Imposible carambolear

El gran problema de Pure Pool es que sólo tiene un tipo de cámara: en primera persona. Si bien hay que reconocer que funciona bastante bien para los tiros normales, al poco tiempo te darás cuenta lo inútil que es esta vista cuando quieres hacer carambolas complicadas. Sencillamente no puedes mirar atrás, así que es imposible golpear una bola usando las bandas que no están en tu ángulo de visión. Es un juego de billar donde el 95% de los tiros son directos a las troneras.

No hay vista cenital, ni puedes moverte por la mesa libremente (hay una cámara general que puedes activar pero no es de útil). No es mala idea usar la cámara en primera persona, te mete en la partida, pero no habría venido mal poder cambiar a un ángulo cenital como sí se podía en Hustle Kings.

Al margen de este (gran) problema. El control es asequible para cualquiera, aunque cuesta coger el punto a la fuerza del ataque. Las guías en pantalla que indican la dirección de las bolas ayudan a crear tiros perfectos.

Realismo ante todo

Es indudable la calidad gráfica de Pure Pool. El aspecto de la mesa, los tacos, las bolas, el escenario de fondo… es de un realismo mágico. Especialmente la física es muy natural y sientes el peso de las bolas, las inercias y el rozamiento del tapete. Pure Pool es magnífico a nivel visual.

De nuevo hecho a faltar otros colores en las bolas, nuevos tipos de mesa o diferentes escenarios, que le darían más variedad visual al juego.


Conclusión

Pure Pool tiene una base de simulación muy realista y precisa. En este sentido es un juego de billar perfecto. Sin embargo falla en todo lo demás, las grandes carencias que tiene hace que Pure Pool se vea cojo en todo. Los menús son simples, sólo hay un escenario, dos estilos de billar americano (falta un Snooker o Billar Francés, por favor), faltan modos de juego por un tubo y, en general, es un juego sin esa personalidad que sí tenía Hustle Kings. Lástima.